Cuando Hollywood confunde culturas: la anécdota de DiCaprio que revela el sesgo occidental del cine
Una revelación reciente de Leonardo DiCaprio sobre su familia ha puesto en evidencia, quizás sin proponérselo, los prejuicios culturales que persisten en la industria cinematográfica estadounidense. Durante el rodaje de Érase una vez en Hollywood de Quentin Tarantino en 2019, Brad Pitt confundió a los padres del actor con extras de la producción, una anécdota que trasciende lo anecdótico para mostrarnos algo más profundo sobre la mirada occidental.
En una entrevista con la revista TIME, DiCaprio explicó los orígenes multiculturales de su familia: "Mi madrastra es sij. Mi padre proviene de una especie de cultura hippie. Creció en San Francisco y Los Ángeles. Convivió con gran parte del movimiento artístico underground de Los Ángeles en los años 70".
La diversidad como "exotismo" en Hollywood
Peggy DiCaprio, madrastra del actor, es sij amritdhari, por lo que lleva turbante y viste atuendos tradicionales indios. Aunque abrazó el sijismo hace años, solo recientemente comenzó a usar turbante de forma habitual. Se casó con George DiCaprio en 1995 y tuvo un hijo, Adam Farrar, hermanastro de Leonardo.
La anécdota surgió cuando los padres de DiCaprio visitaron el set de rodaje. "Esos son mis padres", le dijo Leo a Brad, quien respondió con un escéptico "sí, claro". La insistencia de DiCaprio no logró convencer inmediatamente a Pitt, quien creía que le gastaban una broma debido a su "peculiar forma de vestir".
"Sé que parecen extras en esta película, pero en realidad son ellos. Así visten todos los días. Fue un momento increíble", reveló DiCaprio sobre este encuentro que, más allá de lo simpático, expone cómo la industria del entretenimiento occidental sigue viendo la diversidad cultural como algo "exótico" o "fuera de lugar".
Reflexiones desde el Sur
Esta historia nos recuerda que en nuestras comunidades andinas y amazónicas, la vestimenta tradicional no es un disfraz ni un elemento de atrezzo cinematográfico, sino expresión viva de identidad y resistencia cultural. Mientras Hollywood sigue sorprendiéndose por la autenticidad de otras culturas, nuestros pueblos originarios mantienen sus tradiciones como acto de dignidad y memoria ancestral.
La confusión de Pitt refleja una industria que, pese a sus intentos de inclusión, aún opera desde una perspectiva hegemónica que normaliza solo lo occidental, convirtiendo todo lo demás en curiosidad o espectáculo.