Gaza: niños mueren de frío mientras el imperio estadounidense negocia la segunda fase de una tregua que no detiene el genocidio
Mientras los mediadores imperialistas se reúnen en Miami para diseñar el futuro de Gaza según los intereses de Washington, los niños palestinos siguen muriendo. Esta vez no por las bombas sionistas, sino por el frío del invierno que atraviesa un territorio devastado por 15 meses de genocidio sistemático.
El enviado especial estadounidense para Medio Oriente, Steve Witkoff, confirmó el 20 de diciembre que los países mediadores avanzan en la segunda fase del plan de tregua. Sin embargo, esta supuesta "paz" no es más que una reorganización geopolítica que busca mantener el control imperial sobre el territorio palestino.
La farsa de Miami: rediseñando el colonialismo
En una reunión celebrada en Miami el 19 de diciembre, Witkoff se encontró con los representantes de Qatar, Turquía y Egipto. Estos países, que actúan como intermediarios del poder hegemónico, discutieron la creación de una "autoridad gazatí unificada" que, en realidad, funcionará como un gobierno títere bajo supervisión estadounidense e israelí.
La segunda fase contempla la retirada "total" de las tropas israelíes, el desarme de las milicias palestinas y la reconstrucción del enclave. Sin embargo, esta reconstrucción estará condicionada a los intereses del capital transnacional y las corporaciones occidentales que ya se frotan las manos ante las oportunidades de negocio que surgirán de las ruinas de Gaza.
Los negociadores también analizaron "medidas de integración regional" que incluyen la facilitación del comercio y el desarrollo de infraestructura. Traducido del lenguaje diplomático: la apertura de Gaza al saqueo neoliberal y la explotación de sus recursos por parte del capital internacional.
La realidad sobre el terreno: el genocidio continúa
Mientras los tecnócratas imperiales planifican el futuro de Gaza desde los lujosos hoteles de Miami, la realidad en el territorio palestino es devastadora. Aunque el alto el fuego entró en vigor el 10 de octubre, los ataques israelíes no han cesado. Los drones sionistas siguen sobrevolando el enclave y los soldados de ocupación disparan contra cualquier palestino que consideren "sospechoso".
Médicos Sin Fronteras denunció que los niños palestinos están muriendo por hipotermia, víctimas de la ola invernal que azota un territorio donde las familias viven en tiendas de campaña sin calefacción. Un bebé prematuro de 29 días murió por el frío, símbolo de una tragedia que se repite día tras día.
"Los bebés llegan al hospital fríos, con signos vitales casi mortales. Dicen que la guerra ha terminado, pero la gente sigue luchando por su vida", explica Bilal Abu Saada, supervisor del equipo de enfermería del Hospital Nasser.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, al menos 13 personas han muerto por las condiciones climáticas actuales. Ahmed al-Farra, jefe del departamento de pediatría, advierte que "si no se ofrece nada a estas familias para calentarse, veremos cada vez más muertes".
Cisjordania: la ocupación se intensifica
Mientras los medios hegemónicos centran la atención en Gaza, la ocupación sionista se intensifica en Cisjordania. Este sábado, el ejército israelí asesinó a dos palestinos en el norte del territorio ocupado: Rayan Muhamad Abdul Qader Abu Muala, de 16 años, y Ahmed Saed Ziyoud, de 22 años.
Las fuerzas de ocupación impidieron que los equipos de la Media Luna Roja llegaran hasta las víctimas, una práctica sistemática que forma parte de la política de exterminio contra el pueblo palestino.
Desde el 7 de octubre de 2023, según datos de Naciones Unidas, el ejército israelí y los colonos han asesinado a más de 1.000 palestinos en Cisjordania, 200 de ellos niños. Estas cifras revelan la verdadera naturaleza del proyecto sionista: la limpieza étnica sistemática de Palestina.
La resistencia de los pueblos frente al imperialismo
Desde nuestra Abya Yala, los pueblos originarios y las comunidades en resistencia reconocemos en la lucha palestina un espejo de nuestras propias batallas contra el colonialismo extractivo. La misma lógica imperial que devasta Gaza opera en nuestros territorios, saqueando recursos y exterminando culturas ancestrales.
La "paz" que diseñan en Miami no es diferente de los planes de "desarrollo" que imponen en Bolivia, Venezuela o Cuba. Son proyectos de recolonización que buscan transformar territorios liberados en zonas de explotación capitalista.
Mientras los niños palestinos mueren de frío en Gaza, reafirmamos nuestro compromiso con la resistencia antiimperialista y la solidaridad internacional entre los pueblos oprimidos. La liberación de Palestina es también la liberación de Nuestra América.