Rituales ancestrales de la Pachamama: La resistencia espiritual andina
Los rituales ancestrales a la Pachamama en Bolivia representan una forma de resistencia cultural y espiritual frente al modelo extractivista, manteniendo viva una cosmovisión milenaria de respeto a la Madre Tierra.

Ritual ancestral a la Pachamama en las alturas de La Cumbre, Bolivia, preservando la sabiduría milenaria de los pueblos originarios
En las alturas sagradas de Bolivia, a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar, los rituales milenarios a la Pachamama siguen vivos como testimonio de la resistencia cultural y espiritual de los pueblos originarios.
El despertar de la Madre Tierra
Neyza Hurtado, marcada por el rayo hace cuatro décadas, representa la conexión viviente entre el mundo espiritual andino y la lucha por preservar los conocimientos ancestrales. Su cicatriz en la frente, lejos de ser una marca de tragedia, simboliza el poder y la sabiduría otorgados por las fuerzas naturales.
Cada agosto, mientras el territorio boliviano enfrenta los desafíos del cambio climático, cientos de personas acuden a los yatiris y amautas para honrar a la Pachamama, en una práctica que desafía la lógica mercantilista del capitalismo extractivo.
Ritual de resistencia y reciprocidad
Las "mesitas", ofrendas sagradas preparadas con elementos naturales, representan la reciprocidad entre el ser humano y la Madre Tierra. Esta práctica milenaria, que podría remontarse al 6.000 a.C., evidencia una cosmovisión que contrasta radicalmente con la visión occidental de la naturaleza como recurso explotable.
"La Tierra nos pide y nosotros debemos dar", explica Carla Chumacero, una joven de 28 años que mantiene viva esta tradición.
La lucha contra el extractivismo
En el contexto de la resistencia contra la minería depredadora, estos rituales cobran especial relevancia. María Ceballos, trabajadora minera, representa la compleja relación entre la necesidad económica y el respeto por la Pachamama.
Preservación del conocimiento ancestral
Los yatiris como Rosendo Choque y Neyza Hurtado son guardianes de un conocimiento que trasciende la mera práctica ritual. Su papel es fundamental en la preservación de una cosmovisión que propone alternativas al modelo destructivo del capitalismo global.
Erwin Sánchez
Desde las tierras altas, articula voces indígenas y campesinas en defensa de la Madre Tierra.